A cuenta de un agujero de seguridad de Napster To Go, en Technology Review hay un interesante artículo sobre los programas que capturan contenidos emitidos en streaming (como Replay Music). Parece ser que, hoy por hoy, estarían protegidos por la ley estadounidense, pero la RIAA puede estar trabajando para cambiar la situación. Como dice su portavoz, Jonathan Lamy:
"the RIAA remain[s] concerned about any products or services that encourage users to illegally transform broadcasts or webcasts into permanent music libraries."Y más adelante afirma Tom Mayes de Replay Music:
"Everything is legal until it's tested, right?" [...] "Will we ever get tested on that? I hope not. We don't have deep pockets. The RIAA has deep pockets."Por otra parte, los principales proveedores de servicios de música en streaming son reticentes a hablar de este tipo de software, para no atraer la atención del gran público sobre él.
¿Qué posibilidades hay de que, legalmente, se prohíba en un futuro el almacenamiento de música y otros contenidos? Puede que ocurra. Otra cosa será conseguir una solución técnica que lo evite. Hace tiempo que desde organizaciones como la RIAA se trabaja contrarreloj, en una carrera por asegurarse el control absoluto sobre la distribución de los contenidos, ahora amenazada por la irrupción de la tecnología y sus consecuencias en las preferencias de los usuarios.
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